Muchas personas son discriminadas por motivos de raza, sexo, orientación sexual, discapacidad o por padecer enfermedades como el SIDA o trastornos mentales. Para que se produzca la discriminación, por tanto, es necesario ver a la persona discriminada como formando parte de un grupo o colectivo por el que se siente rechazo o desagrado.
La base de la discriminación suele encontrarse casi siempre en los estereotipos, que son creencias, ideas y sentimientos negativos o positivos hacia ciertas personas pertenecientes a un grupo determinado. Cuando se realiza una valoración negativa de un grupo en base al estereotipo, el resultado es el prejuicio. Cuando los prejuicios llevan a una persona a actuar de un modo determinado respecto al grupo o individuo prejuzgado, el resultado es la discriminación; por ejemplo, impedir que alguien de raza negra o gitana entre en un determinado local.
¿Cuál es el proceso que lleva a una persona a despreciar o maltratar a otras por ser diferentes?
Categorización. Todos los seres humanos tendemos a categorizar el mundo que nos rodea para poder manejarlo y entenderlo mejor. Por ejemplo, si entramos en un centro comercial y necesitamos información sobre un producto, buscamos una persona que encaje dentro de la categoría de dependiente y la encontramos fácilmente consiguiendo así, de forma rápida, aquello que deseábamos.
El problema es que la clasificación social hace que se exageren las diferencias entre grupos y que los veamos como muy homogéneos, de manera que todos sus miembros nos parecen iguales. Por ejemplo, ¿qué imagen viene a tu mente cuando piensas en un medico, un abogado o un albañil?
Estereotipos. Esta tendencia a establecer categorías y a agrupar a las personas dentro de ellas es lo que da lugar a los estereotipos, que van más allá de la mera categorización e incluyen rasgos de personalidad, emociones, aficiones, gustos, etc. que se cree que comparten los miembros de un grupo. Así, alguien puede pensar que un medico es aburrido y que no le gustará ir a una fiesta de disfraces.
La información que contienen los estereotipos es la siguiente:
Información acertada pero exagerada. Por ejemplo, los hombres son, efectivamente, más agresivos que las mujeres, pero estas diferencias son bastante pequeñas, aunque tiendan a verse como mayores y sólo se dan en la agresividad física, no habiendo diferencia en la verbal.
Información errónea. Los estereotipos sobre homosexuales, por ejemplo, definen a los hombres como afeminados y a las mujeres como masculinas y consideran que los gay se sienten más atraídos por niños. La realidad es que hombres afeminados y mujeres masculinas se dan por igual tanto entre homosexuales como entre heterosexuales y que el acoso de homosexuales a niños es menos frecuente que entre heterosexuales.
Luchar por la igualdad y el cambio de los estereotipos.
La base de la discriminación suele encontrarse casi siempre en los estereotipos, que son creencias, ideas y sentimientos negativos o positivos hacia ciertas personas pertenecientes a un grupo determinado. Cuando se realiza una valoración negativa de un grupo en base al estereotipo, el resultado es el prejuicio. Cuando los prejuicios llevan a una persona a actuar de un modo determinado respecto al grupo o individuo prejuzgado, el resultado es la discriminación; por ejemplo, impedir que alguien de raza negra o gitana entre en un determinado local.
¿Cuál es el proceso que lleva a una persona a despreciar o maltratar a otras por ser diferentes?
Categorización. Todos los seres humanos tendemos a categorizar el mundo que nos rodea para poder manejarlo y entenderlo mejor. Por ejemplo, si entramos en un centro comercial y necesitamos información sobre un producto, buscamos una persona que encaje dentro de la categoría de dependiente y la encontramos fácilmente consiguiendo así, de forma rápida, aquello que deseábamos.
El problema es que la clasificación social hace que se exageren las diferencias entre grupos y que los veamos como muy homogéneos, de manera que todos sus miembros nos parecen iguales. Por ejemplo, ¿qué imagen viene a tu mente cuando piensas en un medico, un abogado o un albañil?
Estereotipos. Esta tendencia a establecer categorías y a agrupar a las personas dentro de ellas es lo que da lugar a los estereotipos, que van más allá de la mera categorización e incluyen rasgos de personalidad, emociones, aficiones, gustos, etc. que se cree que comparten los miembros de un grupo. Así, alguien puede pensar que un medico es aburrido y que no le gustará ir a una fiesta de disfraces.
La información que contienen los estereotipos es la siguiente:
Información acertada pero exagerada. Por ejemplo, los hombres son, efectivamente, más agresivos que las mujeres, pero estas diferencias son bastante pequeñas, aunque tiendan a verse como mayores y sólo se dan en la agresividad física, no habiendo diferencia en la verbal.
Información errónea. Los estereotipos sobre homosexuales, por ejemplo, definen a los hombres como afeminados y a las mujeres como masculinas y consideran que los gay se sienten más atraídos por niños. La realidad es que hombres afeminados y mujeres masculinas se dan por igual tanto entre homosexuales como entre heterosexuales y que el acoso de homosexuales a niños es menos frecuente que entre heterosexuales.
Luchar por la igualdad y el cambio de los estereotipos.
Se trata de luchar activamente por la igualdad de derechos. Los grupos feministas han logrado echar abajo las leyes discriminatorias empezando por la prohibición de votar y los activistas homosexuales aún en estos tiempos tratan de conseguir la igualdad ante la ley, como el matrimonio homosexual y combaten activamente el prejuicio. Lo mismo puede decirse de asociaciones de gitanos que luchan activamente por la plena integración de los suyos en una sociedad que no los discrimine.
Valorar la diversidad en todos los sentidos.
Piensa que cuánto más variado sea tu ambiente, mayor será tu creatividad; tendrás la posibilidad de ampliar tus conocimientos y puntos de vista, enriqueciendo así tu personalidad; posibilidad de aprender de la sabiduría de otras culturas; aumento de la libertad al no tener que someterse a roles estrechos acordes con estereotipos...
Acepta que no lo vas a entender todo ni lo vas a compartir todo. Cada grupo tiene sus costumbres. Piensa que puede que haya alguien por ahí que no entienda que tú o personas muy cercanas a vos te hayas hecho voluntariamente agujeros en las orejas para ponerte un adorno. No necesita entenderlo, sólo aceptarlo.
No te calles ante un comentario o chiste prejuicioso. Decile a la persona que entiendes que no trataba de hacer daño a nadie pero que ese tipo de bromas son dañinas para mucha gente. Demuestra que no te hacen gracia ese tipo de comentarios.
No des tu apoyo ni tu dinero a organizaciones que no respetan los derechos humanos.
Sentirse bien con uno mismo es importante a la hora de aceptar a los que son diferentes, pues no tendrás que utilizarlos para aumentar tu autoestima. Muchas veces se proyecta la culpa en aquellos que son diferentes.
2 comentarios:
El de los estereotipos de homosexual me hizo acordar a mi papa que piensa que afeminado es = gay,pedofilo y drogadicto
FELIZ SABADO TOMSON AMIGA QUERIDA!!!
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