jueves, 29 de marzo de 2012

Histeria Conversiva


Histeria de conversión:
Se denomina conversión a un proceso inconciente a través del cual determinados conflictos intrapsíquicos, generadores de intensa ansiedad, alcanzan una representación externa simbólica. Siempre expresa en alguna medida lo reprimido y las fuerzas represoras.

Los signos más característicos de este tipo de histeria son las conversiones
somáticas que se desarrollan como resultado de presiones psíquicas inconcientes. La formación sintomatológica incluye una satisfacción impulsiva y, a la vez, mecanismos de inhibición, negación y formación reactiva, así como el autocastigo.

Los signos y síntomas de la histeria de conversión son predominantemente
somáticos. Pueden ser divididos en paroxísticos y permanentes, siendo cada uno de estos grupos susceptible de múltiples divisiones.

Histeria de disociación:
En la disociación de la vida psíquica existe un aislamiento o escisión de algunos elementos del total de la personalidad, pudiendo estos elementos ser separadamente observados y estudiados. A través de este proceso de disociación se produce la inconciente separación de una idea, impulso, función o conocimiento del conjunto de la vida psíquica, de manera que la síntesis e integración de la personalidad quedan rotas.

Hablamos de histeria de disociación cuando los procesos de disociación alcanzan tal grado que no quedan únicamente en el plano inconciente, sino que se presentan como estados patológicos que, en un momento dado, afectan globalmente toda la personalidad y comportamiento del sujeto de manera franca, masiva y clínicamente evidenciable.

La disociación es una desintegrativa consecuencia de ciertos traumas o situaciones de estrés individualmente intolerables, debiendo advertirse que estos traumas y situaciones pueden ser de naturaleza orgánica o psicológica, o de ambas a la vez.

Existen cinco grupos de disociación histérica: disociación fragmentaria, en forma de despersonalización y amnesia histérica; disociación simultánea, de funciones psíquicas; la disociación alternante, en forma de sonambulismo, fugas y doble personalidad; estados disociativos de trance y, el quinto, de disociación hipnótica.

sábado, 17 de marzo de 2012

Discriminación


La base de la discriminación suele encontrarse casi siempre en los estereotipos, que son creencias, ideas y sentimientos negativos o positivos hacia ciertas personas pertenecientes a un grupo determinado. Cuando se realiza una valoración negativa de un grupo en base al estereotipo, el resultado es el prejuicio. Cuando los prejuicios llevan a una persona a actuar de un modo determinado respecto al grupo o individuo prejuzgado, el resultado es la discriminación (por ejemplo, impedir que alguien de raza negra o de otra religión entre en un determinado local).

¿Cuál es el proceso que lleva a una persona a despreciar o maltratar a otras por ser diferentes?
Categorización: Todos los seres humanos tendemos a categorizar el mundo que nos rodea para poder manejarlo y entenderlo mejor. Por ejemplo, si entramos en un centro comercial y necesitamos información sobre un producto, buscamos una persona que encaje dentro de la categoría de empleado y la encontramos fácilmente consiguiendo así, de forma rápida, aquello que deseábamos.

El problema es que la clasificación social hace que se exageren las diferencias entre grupos y que los veamos como muy homogéneos, de manera que todos sus miembros nos parecen iguales. Por ejemplo, ¿qué imagen viene a nuestra mente cuando pensamos en un contador, un abogado o un albañil?

Estereotipos: Esta tendencia a establecer categorías y a agrupar a las personas dentro de ellas es lo que da lugar a los estereotipos, que van más allá de la mera categorización e incluyen rasgos de personalidad, emociones, aficiones, gustos, etc. que se cree que comparten los miembros de un grupo. Así, alguien puede pensar que un contador es aburrido y que no le gustará ir de campamento, que un abogado es una persona inaccesible o que un albañil no esta preparado para un concierto en el teatro.

La información que contienen los estereotipos es la siguiente:
Información acertada pero exagerada. Por ejemplo, los hombres son, efectivamente, más agresivos que las mujeres, pero estas diferencias son bastante pequeñas, aunque tiendan a verse como mayores y sólo se dan en la agresividad física, no habiendo diferencia en la verbal.

Información errónea. Los estereotipos sobre homosexuales, por ejemplo, definen a los hombres como afeminados y a las mujeres como masculinas y consideran que los gay se sienten más atraídos por niños. La realidad es que hombres afeminados y mujeres masculinas se dan por igual tanto entre homosexuales como entre heterosexuales y que el acoso de homosexuales a niños es menos frecuente que entre heterosexuales.

Muchas personas son discriminadas por motivos de raza, sexo, orientación sexual, discapacidad o por padecer enfermedades como el SIDA o trastornos mentales. Para que se produzca la discriminación, es necesario ver a la persona discriminada como formando parte de un grupo o colectivo por el que se siente rechazo o desagrado.

En casi todos los países desarrollados existe actualmente el rechazo por los inmigrantes, gente que huye de su país buscando mejores perspectivas de trabajo o huyendo de la guerra, las empresas se aprovechan de esa gente que desprecian, pagándoles salarios más bajos y asignándoles las tareas más pesadas.

La igualdad de oportunidades es una forma eficaz para comenzar a terminar con las diferencias.

lunes, 12 de marzo de 2012

Realidad


Vivimos en un mundo en la que las enfermedades mentales están muy estigmatizadas. No siempre conocemos lo suficiente acerca de ellas o la información que nos llega es incompleta o errónea. Todo esto puede llevar a que quienes las padezcan, puedan sufrir un aislamiento social.

Sin embargo, en contra de lo que se pueda creer, estos trastornos están a la orden del día y cada vez son más las personas que se someten a un tratamiento para poder llevar una vida normal.

Los trastornos psicológicos son las alteraciones leves del estado mental, que afectan el desenvolvimiento normal del individuo en la sociedad. Se manifiestan como anomalías en el razonamiento o en el comportamiento, se dificulta el reconocimiento de la realidad y la adaptación a las condiciones de vida.

Cuando disfrutamos de algo estamos sintiendo satisfacción y placer, nos hace sentir plenos ante la vida y a la vez también nos aleja por un momento de los problemas. Lo que le sucede a la mayoría de las personas es que por distintos motivos, como son la falta de tiempo y el exceso de problemas pierden la capacidad de disfrutar y especialmente disfrutar de las pequeñas cosas de la vida que al final son las que mayor satisfacción nos dan.

El objetivo es recuperar lo que hemos olvidado, disfrutar la vida. Siempre hay que tener presente que el placer y la salud van de la mano, comenzando a valorar y a aprender las pequeñas pero a la vez inmensas cosas que nos rodean como lo son nuestros amigos, la familia, los compañeros e incluso nuestras mascotas, dejando lo material de lado.

Para poder disfrutar principalmente nos tenemos que sentir bien con nosotros mismos, estar conformes con nuestra manera de actuar y nuestra manera de afrontar las diferentes situaciones que se nos presentan, como así ser capaces de manejar nuestros problemas. También tenemos que estar bien con los demás ya que de esta manera nos vamos a relacionar mejor con los que nos rodean, saber confiar y valorara las personas y que estén con nosotros para toda la vida. Así también saber afrontar los problemas, no escapar de ellos, hacerle frente para poder fijarnos metas y cumplirlas.


Aparte del hombre, nadie se suicida, ningún árbol, ningún pájaro
Aparte del hombre, nadie necesita psiquiatras
Aparte del hombre, todo está exactamente como tiene que estarlo, perfectamente feliz
En los cantos de los pájaros, ¿sientes que hay tristeza?
Solo hay una alegría desbordante
No están hablando sobre grandes temas filosóficos, no están rezando en las iglesias, no están diciendo nada concreto
Es la felicidad que les produce una energía desbordante, lo que los hace sentirse en casa
No tienen nada, ni dinero, ni poder, ni prestigio
No padecen un complejo de inferioridad, ni superioridad
No sufren de esquizofrenia
Tenemos mucho que aprender de los árboles, y de los animales.
Osho

viernes, 9 de marzo de 2012

Alexitimia

El término alexitimia fue acuñado por Sifneos (1972) para describir algunas características clínicas y de personalidad de los pacientes que presentaban trastornos psicosomáticos. Un constructo (Constructo es, en psicología, cualquier entidad hipotética de difícil definición dentro de una teoría científica. Un constructo es algo de lo que se sabe que existe, pero cuya definición es difícil o controvertida. Son constructos la inteligencia, la personalidad y la creatividad, por ejemplo.) Que consta de cuatro características de carácter cognitivo-afectivo:

Dificultad para identificar y describir sentimientos
Dificultad para distinguir los sentimientos de las sensaciones corporales
Reducción o ausencia de pensamiento simbólico (falta de habilidad imaginativa)
Déficit cognitivo de la capacidad para procesar estímulos afectivos.

Actualmente el término alexitimia se define como:
Dificultad para verbalizar emociones, reconocerlas y utilizarlas como señales internas.
Dificultad para localizar las sensaciones del propio cuerpo.
Tendencia a utilizar la acción como estrategia de afrontamiento ante situaciones conflictivas.
Pensamiento concreto, desprovisto de símbolos y abstracciones.
Rigidez en la comunicación verbal, con escasa mímica y pocos movimientos corporales.

Las emociones son fenómenos multidimensionales, son estados afectivos subjetivos, también se las define como respuestas biológicas que preparan al cuerpo para la acción adaptativa. Cuando sentimos la emoción, se produce en nuestros cuerpo una serie de cambios fisiológicos (el corazón late con fuerza, los músculos se tensan, la respiración se acelera, nos sonrojamos, aparecen temblores, se dilata la pupila y aumenta la sudoración), y además, también produce expresiones faciales.

Las emociones básicas facilitan una respuesta funcional a un acontecimiento producido por un evento externo en la vida cotidiana durante un pequeño período de tiempo y aparece en las primeras etapas del desarrollo evolutivo.

Hay 6 expresiones emocionales que se consideran universales:
Sorpresa
Tristeza
Miedo
Disgusto, repugnancia, asco (aversión)
Felicidad
Ira, enojo, cólera

A parte de estas 6 expresiones emocionales existen otras como la envidia, los celos, la depresión, ansiedad, resentimiento, vergüenza, etc.

La alexitimia no aparece como un trastorno de la conducta, sino que es un síntoma de otras enfermedades y trastornos.

Por otro lado, hay estudios que han hipotetizado que la limitada conciencia de los estados emocionales y las dificultades en el procesamiento cognitivo de los afectos que presentan los sujetos con elevada alexitimia favorecen la aparición de un determinado estilo perceptivo y cognitivo: el estilo somático amplificador. Este estilo sería característico de las personas que presentan hipocondría e implica varios elementos:

Hipervigilancia corporal que conlleva un incremento de la focalización de la atención en las sensaciones corporales desagradables
Tendencia a seleccionar y centrarse en ciertas sensaciones infrecuentes o tenues
Propensión a valorar las sensaciones somáticas y viscerales como anómalas e indicadoras de enfermedad, en lugar de considerarlas como normales.

Además, también  hay estudios que han encontrado una alta tasa de alexitimia en los siguientes casos:

Pacientes que presentan conductas adictivas
Diferentes tipos de trastornos de la alimentación
Desajustes de pareja
Trastornos del pánico y de ansiedad generalizada

Por lo general el hombre es más propenso que la mujer a padecer alexitimia debido a que la comunicación entre los dos hemisferios cerebrales es mejor en la mujer que en el hombre porque el cuerpo calloso (estructura que une ambos hemisferios) es más voluminoso y favorece las conexiones neuronales.

En cuanto al tratamiento de la alexitimia no se ha estudiado todavía en profundidad dado que la persona afectada, generalmente, no acude a pedir ayuda sino que lo suelen hacer las personas que le rodean; familiares, amigos o personas con vínculo importante en sus vidas. Lo que sí se está haciendo son terapias grupales en las que se les muestran afectos en progresiones de los más sencillos hacia los más complicados.

En ciertas circunstancias es importante saber controlar las emociones y para ello se pueden seguir las siguientes pautas:
Mantener una apariencia tranquila ante los estímulos que nos provocan temor.
Controlar el lenguaje, porque a través del mismo, ayudamos a disciplinar las emociones.
Aclarar cada día nuestros pensamientos.
Aprender controlar en la mente las situaciones nuevas y compararlas con las que ya conocemos.

miércoles, 7 de marzo de 2012

Modelo de las tres vías hacia la felicidad


Uno de los fundadores de la psicología positiva el doctor Martín Seligman, dispuso una forma de estructurar la investigación para avanzar y proyectarla al futuro.

La teoría del doctor Seligman, las tres vías fundamentales a través de las cuales podemos iniciar o en su defecto perseguir el camino de la felicidad es:

La vida placentera: Esta vía persigue aumentar las emociones positivas en el pasado, en el presente y en el futuro.

La vida comprometida: Se trata de la apuesta en práctica de las fortalezas personales con el objetivo de desarrollar un mayor número de experiencias óptimas, de flujo de conciencia.

La vida significativa: Esta vía incluiría el sentido de la vida y el desarrollo de objetivos que van más allá de uno mismo.

Las tres vías no son exclusivas ni exhaustivas, esto quiere decir que se pueden perseguir diversos objetivos en el camino de la felicidad y recorrerse desde diferentes lugares.

Se podrían resaltar del trabajo de este pionero de la psicología positiva  la concepción de la felicidad como un proceso. De hecho estudia la felicidad desde el punto de vista de las experiencias positivas subjetivas, desde  la personalidad positiva y desde las organizaciones positivas. Es decir que plantean que es posible pasar de vivir momentos positivos a estados más estables de felicidad, lo cual me parece un auténtico descubrimiento científico.

La felicidad es una aspiración de todos los seres humanos. Un anhelo que perseguimos en todas las etapas de nuestras vidas por caminos y senderos diferentes. Pero ¿qué es la felicidad?, ¿se trata de una colección de instantes de una vida o un estado más o menos estable?, ¿es una quimera o puede alcanzarse?

La felicidad incluye conceptos muy significativos como alegría, pero también encontramos emociones, que no son necesariamente positivas; lucha, compromiso, reto, dolor.

"Los hombres olvidan siempre que la felicidad humana es una disposición de la mente y no una condición de las circunstancias". John Locke.

"Buscamos la felicidad, pero sin saber dónde, como los borrachos buscan su casa, sabiendo que tienen una".François Marie Arouet Voltaire.

"La falta de las cosas que el hombre desea es un elemento indispensable de la felicidad". Robert Louis Stevenson

jueves, 1 de marzo de 2012

Parkinson

Es una enfermedad del sistema nervioso central y se caracteriza por ser un padecimiento crónico degenerativo. A pesar de que aún no es posible la cura, en las últimas décadas se han hecho avances fundamentales en el esclarecimiento de las relaciones fisiopatológicas así como en la terapia de la enfermedad de Parkinson.

Síntomas: Los cuatros síntomas principales son el temblor en las manos, los brazos, las piernas, la mandíbula y la cara; la rigidez de las extremidades y el tronco; la bradicinesia o lentitud de movimiento; y la inestabilidad de postura o la coordinación o balance afectados. A medida que estos síntomas se hacen más pronunciados, los pacientes pueden tener dificultad en caminar, hablar y realizar otras tareas simples.
La enfermedad es crónica, lo que significa que persiste por un largo periodo de tiempo, como progresiva, que significa que sus síntomas empeoran con el tiempo. No es contagiosa ni usualmente se hereda es decir, no pasa directamente de un miembro de la familia o de una generación a la siguiente.

La enfermedad de Parkinson ocurre cuando células nerviosas, o neuronas, en un área del cerebro conocida como sustancia negra, mueren o sufren deterioro. Normalmente, estas neuronas producen un producto químico cerebral importante conocido como dopamina. La dopamina es un mensajero químico responsable de transmitir las señales entre la sustancia negra y la siguiente estación relevadora del cerebro, el cuerpo estriado, para producir actividad muscular fluida y con un propósito.

La pérdida de dopamina hace que las células nerviosas del estriado actúen sin control, dejando al paciente incapaz de dirigir o controlar sus movimientos de forma normal. Los estudios han demostrado que los pacientes de Parkinson tienen una pérdida del 80% o más de las células productoras de dopamina en la sustancia negra. La causa de esta muerte o deterioro celular se desconoce, pero resultados significativos obtenidos por científicos de investigación continúan produciendo pistas nuevas y sumamente interesantes de la enfermedad.

La vida familiar, social y laboral se altera por completo ante la aparición de una enfermedad, más aún si ésta es irreversible o degenerativa, situación que obliga al paciente a cambiar de manera radical su modo de vida.

Hay enfermedades para las que la medicina actual no tiene soluciones o cuyos tratamientos no logran los resultados esperados. Por esta razón, recibir la noticia de que se padece una dolencia de este tipo es un duro golpe para quien la sufre y para sus familiares.

Desde la psicología, se afirma que se puede convivir con una enfermedad de estas características, después de superar una serie de etapas, que pasan por la negación de la situación, en primer lugar, y por cierta rebeldía después.
Son actitudes normales que con el paso del tiempo y la ayuda de los seres queridos, suelen desembocar en una última fase de aceptación y adaptación, aunque la tristeza y los episodios depresivos pueden aparecer de manera continuada.

Vivir el presente, Disfrutar de lo que se tiene y no sufrir por lo que se pueda perder.
Medir la vida en términos de calidad, no de cantidad, Intentar ver la vida en profundidad, a lo ancho, lo alto y lo largo, y no solo a lo largo, por los metros recorridos.

En la enfermedad de Parkinson, es importante reconocer los síntomas psicológicos y neuro-psiquiátricos, tales como los trastornos del estado del ánimo, la ansiedad, los estados psicóticos (delirios y alucinaciones), o los trastornos sexuales porque son muy frecuentes y repercuten en la calidad de vida.

La depresión en la enfermedad de Parkinson es uno de los trastornos emocionales más frecuentes. Hoy en día, la cifra de afectados de enfermedad de Parkinson que desarrollarán síntomas depresivos en algún momento a lo largo del curso de la enfermedad es un indice alto.
Las mujeres con enfermedad de Parkinson presentan más riesgo de padecer depresión que los hombres. A su vez, las personas que antes de sufrir la enfermedad de Parkinson ya habían padecido depresión tienen más probabilidad de volver a presentar un nuevo episodio depresivo.


Consejos Psicológicos para pacientes:
Aceptación de la enfermedad.
Aceptación y adaptación a los cambios.
Mejorar el estado anímico / control de emociones.
Mejorar la calidad de vida.
Fomentar relaciones sociales y familiares.
Estimular la autonomía.
Fomentar la vida activa.
Aumentar el autoconcepto y la autoestima.
Estimular la toma de decisiones.
Favorecer el autocontrol.
Proporcionar la información necesaria.
Cuidar al cuidador del enfermo de Parkinson.