viernes, 13 de marzo de 2009

La Psicologia, al servicio de la prevencion del infarto


La Psicología, al servicio de la prevención del infarto

La personalidad y la depresión inciden en la salud coronaria

Desde hace años, se sabe que el estado emocional de un individuo esta asociada con la enfermedad coronaria y viceversa. Pero ¿como se encara el tratamiento de los aspectos emocionales de estos pacientes? ¿Es posible prevenir un infarto curando, por ejemplo, la depresión?

La UBA institución ha creado un equipo especifico de psicocardiologia, abocado al tratamiento emocional de pacientes coronarios.

Esta nueva disciplina cuenta con pocos profesionales en el país y aborda los factores psicológicos que favorecen la aparición y el desarrollo de la enfermedad cardiovascular.
Los factores de riesgo no son solo los biomédicos; la personalidad, el estrés y las emociones afectan la salud coronaria. Así las sensaciones de frustración, ira, sufrimiento y de corazón roto pueden fomentar el infarto.

Un reciente estudio, acaba de confirmar que los pacientes con cuadros depresivos graves tienen un mayor estado inflamatorio y riesgo de trombosis que los pacientes sin depresión.

Pero el estudio llega mas lejos y asegura que un tratamiento antidepresivo mejora la calidad de vida de los pacientes, reduce estos riesgos y aumenta la adherencia al tratamiento y el deseo de recuperación. En realidad, el paciente deprimido que recibe apoyo psicológico o medicación antidepresiva reduce hasta en un tercio su riesgo de padecer episodios cardiacos.

El grupo de mayor riesgo emocional esta formado por personas que padecen depresión ansiosa. Se trata de una depresión explosiva, impaciente, irritable, con altos niveles de distres. Es la depresión del enojo permanente, no la de tristeza o de duelo.

Los pacientes deprimidos suelen tener estilos de vida poco saludables y no siguen el tratamiento en forma adecuada. Los enfermos que tuvieron un infarto de miocardio reciente y presentan síntomas de depresión no son proclives a los ejercicios de rehabilitación, la dieta y al medicación recomendada.

Otro aspecto a trabajar son los cambios que exige la nueva condición de cardiaco.
“Al paciente le hacen una angioplastia; el medico le dice que tenia el 95% de la arteria tapada; se asusta; deja de fumar, y a los dos meses se olvido porque en la casa tiene problemas o en el trabajo le exigen. O tiene un infarto y el medico le indica que no coma mas con grasa, que no se ponga nervioso, que disfrute del ocio y que camine todos los días.
Es un cambio difícil de hacer de un día para el otro. Por eso, cuando pasa el miedo, reinciden y el riesgo se intensifica.
El psicocardiologo es decisivo en esta etapa, por que ayuda a este necesario cambio de estilo de vida.
La psicoterapia psicocardiologica tambien se despliegan en los consultorios psicologicos. Con los conocimientos necesarios y una escucha atenta, un psicocardiologo no solo puede prever sino tambien prevenir un infarto. Los factores de estres agudo, hay que estar muy atentos a los factores de personalidad propios de un eventual paciente coronario; la impaciencia, el apuro, la irritabilidad, la adiccion al trabajo. Los psicologos tienen que entrenarse para detectar cuando un paciente esta en riesgo fisico. Lo mas arduo del trabajo con estos pacientes es el cambio de habitos, tanto en los que ya tuvieron un episodio como los que saben que tienen factores de riesgo.

1 comentario:

gallega dijo...

BUENOS DIAS AMIGA !!!!......COMO LA MENTE INFLUYE EN EL CUERPO!!!!